La semana pasada estuvimos en Santa Rosa de Copan Honduras.
Donde sus casas son coloniales, calles de piedra con gente hospitalaria.
Estuvimos con la iglesia Amor Viviente, ellos nos ubicaron en un lindo apartamento, cada tiempo de comida la hacíamos en casas de diferentes hermanos de la iglesia. Esta semana caminamos mucho, e iniciábamos muy temprano cuando tres jóvenes de la iglesia llegaban por nosotros y nos llevaban a desayunar en ocasiones caminamos 45 minutos y en calles donde son de subida, llegábamos muy cansados pero en realidad lo disfrutamos al compartir con cada persona que abrió su casa para recibirnos, así fue en cada tiempo de comida. (Comimos sus comidas típicas como: Baleadas, chanco al horno, ticucos etc.)
La iglesia aquí trabaja con células o también conocido por grupos de crecimiento. Cada día trabajamos con uno de ellos en la zona donde se reúnen, mañana y tarde salimos a visitar a las casas de estos lugares para invitarlos en la noches a la reunión que se iba a tener y si nos daban la oportunidad les hablábamos de Dios vimos a muchos de ellos recibiendo a Jesús en sus corazones y reconciliándose, en las noches mucha de la gente a la cual visitábamos llegaba a la reunión y allí nosotros podíamos compartir mas con ellos.
Una historia en especial fue la de Jose, estábamos el día martes en una casa frente a una carretera cuando vimos a un joven dormido, y en realidad nos parecía peligroso que él estuviera hay porque un carro podría atropellarlo así que Fran y otro joven del equipo fueron y le dijeron que se moviera que un carro podría lastimarlo. El esta borracho así que ni se percataba de lo que pasaba el solo se levanto y pregunto ¿y dónde me acuesto? Y Fran le indico.
Al día siguiente estábamos en otra zona y yo iba caminando con una de las chicas de la iglesia y lo vimos, así que nos acercamos a hablarle el ya estaba sobrio y le contamos lo del día anterior, el se mostro agradecido e iniciamos hablarle de Dios, el estaba quebrantado había sido cristiano pero tiene un problema con las drogas él se reconcilio con Dios y en la noche el estaba en la reunión y había llevado a su papa e hijo.
Así como estas tenemos más historias…Ha sido una semana muy buena, viendo el respaldo de Dios en nuestras vidas.
Agradecemos tus oraciones a favor de nosotros.
Ahora estamos en La Entrada esta es otra ciudad de Honduras.
Bendiciones.
